Hola, sobreviviente de la quincena nivel Dark Souls.

Bienvenido a El Billetazo, el único lugar donde puedes entender qué está pasando con tu dinero sin que te dé dolor de cabeza como cuando ves el ticket del súper y piensas: “¿pero si solo compré jamón y Yakults?”.

→ El sube y baja - Mercados

S&P 500

$6,584.29

-0.48%

Nasdaq Composite

$22,141.10

+0.44%

IPC México

$61,798.94

+0.40%

USD/MXN

$18.4402

-0.16%

CETES

Plazo: 1 mes

7.35%

Hoy el S&P 500 amaneció con -0.48%. Traducción: las grandes empresas de EE.UU. traen más bajón que tú cuando te dicen “ya no hay tacos al pastor”. En cambio, el Nasdaq subió +0.44%, o sea, las tecnológicas siguen vivas y coleando, aunque una actualización de Apple te siga matando la pila en 2 horas.

En México, el IPC trepó +0.40%. Nada espectacular, pero suficiente para que los financieros saquen su gráfica y digan “estamos sólidos”. Mientras tanto, el peso se movió poquito contra el dólar (-0.16%), como cuando el Uber avanza pero se queda parado en el mismo semáforo.

Y ojo con los CETES: el plazo a 1 mes paga 7.35%. Eso significa que tu dinero puede trabajar más que tú en la oficina un viernes a las 5 de la tarde.

Datos actualizados al 14 de agosto a las 19:00 hrs.

Billete Nacional

Sheinbaum aplica el “no eres tú, soy yo” a China 🚗.

Claudia Sheinbaum quiso mandar un mensaje estilo “tranquilos, seguimos siendo compas” a China después de anunciar que los autos asiáticos tendrán un arancel del 50%. En cristiano: si un coche chino llegaba barato a México, ahora tendrá un impuesto extra que casi triplica lo que pagaba antes. Y no, no es personal, dijo la presidenta, “solo queremos relaciones sanas y justas”.

El gobierno explica que esta medida busca proteger a la industria mexicana: que las armadoras inviertan aquí y que los autos no entren tan baratos que hagan competencia desleal. China se enojó, Corea del Sur también levantó la ceja, y en el fondo todos saben que es un “a ver si así se animan a producir en México y no solo a vendernos barato”.

Tres puntos clave

  • Arancelazo: México subirá del 20% al 50% los impuestos a autos de países sin TLC, en especial China.

  • Justificación oficial: el gobierno dice que es para evitar precios “injustos” y fomentar inversión en fábricas dentro de México.

  • China responde: Beijing se queja de proteccionismo, pero Sheinbaum insiste en que la relación sigue siendo cordial.

Si estabas cazando un coche chino porque son más baratos que los europeos o americanos, agárrate: esos precios van a subir y quizá ya no te alcance la camioneta que tenías en mente. O sea, el “voy a cambiar mi Chevy por un SUV chino nuevecito” se puede volver “mejor lo arreglo y lo mando a bendecir”.

Si las marcas deciden invertir y producir más en México, a futuro puede haber más empleos en fábricas y autopartes, además de que el país se vuelve más atractivo para otras armadoras. Eso suena bien… pero mientras llega esa promesa, lo que verás en el corto plazo es que el crédito para coches se siente más pesado, y que quizá termines en un Uber más seguido que estrenando nave.

El gobierno dice que sube aranceles “para que haya inversión”. Tú, mientras, viendo cómo tu sueño de estrenar coche chino se transforma en “pues a ver si aguanta otro año el Tsuru”.

Billete Global

Trump quiere acabar la guerra como si fuera pelea de secundaria.

Donald Trump salió con su receta mágica para acabar la guerra en Ucrania: que la OTAN deje de comprar petróleo ruso y que todos los países le claven aranceles de hasta 100% a China. Fácil, rápido… y tan realista como esperar que Televisa deje de hacer refritos.

Tres puntos clave

  • Trump dice que si la OTAN veta el petróleo ruso y castiga a China, Rusia cedería.

  • Turquía, Hungría y Eslovaquia (todos miembros de la OTAN) siguen comprando crudo ruso.

  • Estados Unidos y Reino Unido ya aplican sanciones, pero no todos en la alianza jalan parejo.

Si la OTAN deja de comprar petróleo ruso, la gasolina se va para arriba. Eso significa que llenar tu carro cuesta más, el Uber sube de precio, y hasta el jitomate en el súper llega más caro porque lo transportan en camión. Y si además le ponen impuestos extra a los productos chinos, tu cargador de $150 puede terminar en $300, y la freidora de aire que tanto querías puede costar como si fuera un Ferrari en miniatura.


Las fábricas mexicanas compran muchas piezas y materiales baratos de China. Si eso se encarece, también suben cosas como los coches, los muebles o hasta los electrodomésticos. Los boletos de avión podrían costar más porque el turbosina (la gasolina de aviones) también se encarece. Y cuando a las empresas les cuesta más producir, adivina qué pasa: te lo pasan a ti en el precio final. Así que aunque no compres petróleo ni importes celulares, igual te toca pagar más por casi todo… hasta por esa tele que jurabas renovar en el Buen Fin.

Trump promete acabar la guerra “rapidito”, pero su plan suena más a berrinche de Mi Pobre Angelito: gritos, caos y alguien termina golpeado. Y tú, mientras, viendo cómo tu sueldo apenas alcanza para la gasolina y los Yakults del súper.

Si eres de los que no aman leer o prefieren escuchar algo mientras fingen trabajar, búscanos en Spotify.

El Billetazo es el podcast diario que te explica qué está pasando con el dinero... sin rodeos, sin tecnicismos y con buen humor.

🎙️ Un podcast de El Billetazo News: el medio que convierte las noticias financieras en contenido que sí se entiende.

→ Billete Nacional

El kilo de res en EU: versión “lujo exclusivo para millonarios”.

La carne de res en Estados Unidos está pegando saltos de precio como si fueran brincos de rodeo. Ocho meses seguidos de aumentos, y agosto fue el mayor en casi cuatro años. El problema: hay menos vacas, menos producción y encima un veto sanitario que impidió comprar ganado de México. Hasta aquí ya se veía feo, pero llegó Trump con un arancel del 40% a la carne de Brasil —que era el “parche” barato para mezclar con la estadounidense— y ahora la hamburguesa americana se volvió producto premium.

Menos oferta, más impuestos y más broncas comerciales. Resultado: escasez de carne y precios históricos en los próximos meses. Lo mismo que pasó con los huevos por la gripe aviar en tiempos de Biden, ahora amenaza a convertirse en el nuevo drama de las hamburguesas. Y ojo, no es exageración: ya hay analistas diciendo que este puede ser el gran dolor de cabeza económico de la administración Trump.

Tres puntos clave

  • Escasez: el hato ganadero de EU está en su nivel más bajo en décadas; hay 9% menos vacas procesadas que hace un año.

  • Arancelazo: Trump impuso un impuesto extra de 40% a la carne brasileña, lo que hace inviable importarla.

  • Impacto directo: los precios llevan ocho meses subiendo y se espera que la carne llegue a máximos históricos.

Si en EU sube la carne, en México no tardamos en sentirlo. Somos vecinos y gran parte de la carne que comemos está ligada al comercio con ellos. Así que tu kilo de bistec para las fajitas, tu arrachera del asador o la hamburguesa del carrito de la esquina podrían costar más. Y como la carne es base de tacos, tortas y hasta la barbacoa del domingo, prepárate para que el antojo se lleve un buen pedazo de tu quincena.

Al encarecerse la carne en EU, también sube la presión sobre los precios de sustitutos. Eso significa que pollo, cerdo y hasta el atún en lata podrían subir porque más gente buscará “alternativas baratas”. Además, si México decide aprovechar el hueco exportando más carne al norte, aquí podría haber menos oferta local, empujando aún más los precios. Resultado: tu dieta se puede volver más vegetariana de lo que planeabas, pero no por salud… sino por presupuesto.

Trump quería ser el héroe que protegiera a la industria americana, pero terminó encareciendo la hamburguesa que se supone representa al sueño americano.

Biblia Financiera

TIIE: el clima del dinero (y no trae paraguas).

La TIIE suena como nombre de androide de Star Wars, pero en realidad es el precio base del dinero en México. Imagina que los bancos son compas que se prestan lana entre sí. No van a decir “te presto gratis, brother”, obvio que no: acuerdan una tasa de interés para esos préstamos, y esa tasa es la TIIE.

¿Por qué importa? Porque esa TIIE es la referencia para todo lo demás: tarjetas de crédito, hipotecas, préstamos de coche, créditos empresariales… Es como cuando el primo marca el precio de la chela en la peda, y de ahí todos los demás ajustan su venta. Si la TIIE sube, pedir dinero se encarece; si baja, se abarata.

En tu bolsillo se traduce así: si la TIIE anda alta, la tarjeta cobra más intereses, los créditos se vuelven pesados y básicamente el banco se vuelve más Gandalf que buen samaritano. Si anda baja, las mensualidades son más ligeras y hay chance de endeudarse con menos miedo. En resumen: la TIIE es como el “clima del dinero”, y tú decides si sales con paraguas o con shorts.

Y listo, magnate de supermercado.

Eso fue todo por hoy en El Billetazo, tu dosis diaria de finanzas.

Nos leemos mañana con más noticias, más contexto y más razones para pensar dos veces antes de pagar a meses sin intereses.

— El team Billetazo

¿Qué opinas del newsletter?

No somos tu ex, queremos ser tu relación sana. Dinos qué opinas y lo mejoramos.

Login or Subscribe to participate

Keep Reading

No posts found